+34 666 555 009 (Carlos) | +34 610 221 430 (Cristóbal) garden@totenu.com

Las plantas trepadoras nos dan sombra, privacidad, color y aroma en una dimensión vertical redifiniendo los espacios exteriores.

En el diseño de jardines y terrazas, a menudo centramos la atención en el plano horizontal, descuidando el gran potencial que ofrecen las superficies verticales. Sin embargo, son precisamente estas —muros, paredes, pérgolas o vallas— las que, mediante el uso de plantas trepadoras, pueden convertirse en elementos centrales de un proyecto paisajístico.

Lejos de ser un mero recurso para ocultar estructuras, las enredaderas actúan como una herramienta de diseño fundamental. Permiten integrar la arquitectura con la naturaleza, suavizando líneas duras y transformando un muro inerte en un tapiz vivo y dinámico.

Al cubrir una estructura, no solo aportan una valiosa intimidad, generando pantallas vegetales que nos aíslan visualmente, sino que también introducen texturas, colores y volúmenes que evolucionan con las estaciones.

Un ejemplo claro de su funcionalidad es la creación de zonas de sombra. Un cenador o una pérgola, cuando sus columnas y vigas son colonizadas por una trepadora de hoja frondosa, se convierte en una estancia exterior. Este techo vegetal no solo proporciona un refugio fresco y agradable durante los meses de mayor incidencia solar, sino que crea una atmósfera única, filtrando la luz y generando un ambiente de calma y bienestar.

¿Qué son las plantas trepadoras?

Llamamos plantas trepadoras a las que utilizan una serie de recursos para trepar y elevarse sobre algún soporte que pueda sostenerlas. Intentan agarrarse a otras plantas, pero esto no es muy bueno porque ‘las estrangulan’, las privan de luz y pueden incluso matarlas, así que evitaremos que vivan sobre cualquier árbol o arbusto.

Estas plantas tienen la capacidad única de crecer verticalmente, utilizando diferentes estructuras de soporte.

Además de su atractivo visual, las plantas trepadoras también juegan un papel importante en la biodiversidad del jardín. Proporcionan hábitat y alimento para una variedad de insectos y aves, contribuyendo al equilibrio ecológico.

Asimismo, pueden ayudar a mejorar la eficiencia energética de edificios cuando se utilizan para cubrir paredes exteriores, actuando como aislantes naturales que reducen la temperatura interior durante los meses cálidos y protegen contra el viento en invierno.

Plantas escaladoras en Tot en Ú

Elegir la trepadora adecuada

La elección de la especie adecuada es crucial y depende de un análisis técnico del espacio. Factores como la orientación, las horas de sol directo, el tipo de soporte disponible y el efecto deseado —una cubierta perenne para garantizar la privacidad todo el año o una de hoja caduca que permita el paso del sol en invierno— determinarán el éxito de la plantación.

Aunque las plantas trepadoras se comercializan en contenedor para que puedan plantarse en cualquier época del año, las hay también a raíz desnuda y se comercializan durante el invierno, cuando están en su periodo de reposo. Es en ese periodo cuando es ideal su plantación para que vayan arraigando y comiencen la brotación en primavera con más fuerza. No es recomendable su trasplante cuando están en la fase de crecimiento, en primavera y verano.

Muchos se preguntarán ¿qué pasa con las heladas? Sí, es probable que no podamos prevenir una helada descomunal en nuestra zona, pero si están dentro de la normalidad, no hay ningún problema para su plantación, enraizarán, y esas pequeñas raicillas harán que tengan más vigor a la hora de su brotación en primavera.

Nos dan aroma, color y belleza que caen del cielo. En nuestro Centro de Jardinería, disponemos de una cuidada selección de plantas trepadoras adaptadas a nuestro clima. Si bien la época de floración es un momento idóneo para apreciar su potencial ornamental, mantenemos un surtido constante a lo largo del año.

Nuestro equipo puede asesorarle técnicamente para encontrar la especie que mejor se ajuste a las necesidades de su proyecto, ya sea para un balcón urbano o para el diseño completo de un jardín.

Tipos de trepadoras.

Las plantas trepadoras se pueden ubicar en cualquier lugar: visten un muro, esconden una reja, decoran una pérgola, son ideales para separar ambientes, a lo largo de una valla nos dan intimidad a la vez que la embellecen, y mucho màs.

Entre las principales características de las plantas trepadoras se encuentran sus diversos métodos de escalada.

Todas tienen órganos especializados, ya sea tallos ú hojas modificadas que le permiten agarrarse. Generan en sus tallos zarcillos, ganchos y otras estructuras con las que se anclan para subir en altura. Por ejemplo la hiedra (Hedera helix), utilizan raíces aéreas para adherirse a superficies. La glicinia (Wisteria spp.), tienen tallos volubles que se enroscan alrededor de soportes, mientras que especies como la madreselva (Lonicera spp.) utilizan zarcillos o espinas para sujetarse.

Trachelospermum jasminoides
 
La diversidad de las plantas trepadoras permite su uso en una amplia variedad de climas y condiciones de crecimiento. Existen varios tipos de plantas trepadoras, de hoja ancha, con flores, de tallo fino, sin flores, plantas trepadoras aromáticas… Desde especies de hoja perenne que mantienen su follaje durante todo el año, hasta aquellas de hoja caduca que ofrecen un espectáculo de colores en otoño.

Además existen plantas trepadoras que también son capaces de generar raíces adventicias, como las rastreras, y se comportan de una ú otra manera dependiendo de las características de su entorno. Este tipo de plantas está clasificado como enredaderas. No sólo se apoyan sino que se aferran al sustrato, mediante la generación de pequeños tallos o raíces adventicias.

Luego tenemos las plantas trepadoras cuyo tallo principal se encarga de ganar altura enroscándose para ir subiendo. Estas plantas normalmente tienen zarcillos o tallos secundarios que mejoran su capacidad para trepar. Estas plantas se denominan volubles, generan unos tallos de crecimiento rápido que mediante el movimiento van buscando puntos de apoyo. Cuando el tallo toca un nuevo punto de apoyo empieza a crecer y enrollarse a su alrededor.

Conocerlas para elegir la mejor trepadora.

Como vemos estas plantas pueden adaptarse a distintas necesidades estéticas y funcionales. La elección de la planta trepadora adecuada dependerá de varios factores en función de la utilización que se le quiera dar, como el tipo de soporte disponible, las condiciones de luz, el clima y el efecto deseado.

Es fundamental conocer las necesidades específicas de cada especie para asegurar su correcto desarrollo y mantenimiento. Algunas plantas trepadoras requieren poda regular para mantener su forma y estimular una floración abundante, mientras que otras son más autosuficientes y requieren menos intervención.

Bouganvillea en fachada
 
No es lo mismo si quieres ubicarlas para separar ambientes o para ocultar una valla, que si quieres que embellezca una pérgola o un muro. En el primer caso utilizaremos plantas trepadoras con follajes perennes y en el segundo caso, plantas trepadoras con bellas flores, por ejemplo. También podemos utilizar plantas trepadoras como cubresuelos, ahí es ideal la hiedra en zonas más sombrías.

Las plantas trepadoras son una adición versátil y valiosa a cualquier espacio exterior. Su capacidad para transformar y embellecer superficies verticales, junto con sus beneficios ecológicos y prácticos, las convierte en una opción popular y eficaz para jardineros y paisajistas profesionales.

Integrar una trepadora no es simplemente añadir una planta más; es tomar una decisión de diseño que amplía, enriquece y da una nueva dimensión a su espacio verde.

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies